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Procedente de la mitología del norte de Europa, los gnomos son criaturas de la tierra y de la montaña. La imaginación popular los ve como enanos barbudos, de rasgos toscos y grotescos, usan ropas apretados de color marrón y capuchas monásticas. Según viejas historias tienen la misión de defender y esconder tesoros. Se los asocia con los enanos debido a múltiples características que comparten. Pero los gnomos son mucho mas pequeños, algunos cuentos y leyendas los describen como tan pequeños que caben en la palma de la mano. Viven en montañas o bajo tierra, pero a diferencia de los enanos, no tienen necesidad de usar túneles, sino que se mueven entre la tierra como un pez en el agua. Incluso pueden materializarse y convertirce en tierra o en el tronco de un árbol para esconderse.
Se cree que poseían una gran sabiduría, "Gnomo" proviene de la palabra Gnosis, que en griego significa conocimiento.
No se sabe con exactitud en que momento de la historia se empezó a asociar a los Gnomos con los jardines (hoy en día podemos ver cientos de jardines con estatuillas de gnomos), pero se cree que esta relación comienzo gracias al folklore, donde tradicionalmente se asociaba a estos hombrecillos con la tierra.
Orígen de la leyenda
El origen de las leyendas sobre gnomos tiene varias hipótesis, pero se cree que surgieron de los cabalistas hebreos, especialistas en el pensamiento y escuela esotéricos relacionado al judaísmo.
Los cabalistas creían que el aire, tierra, fuego y agua se movían a merced seres invisibles que animaban estos elementos; el dios hebreo Yahvé asignó el fuego a la salamandra, el aire a los silfos, el agua a las ondinas y la tierra a los gnomos. Así, los gnomos se constituían no solo como conocedores de los secretos de la tierra sino como la propia alma de ésta. Se los consideraba guardianas de minas de oro y plata.
El conocido alquimista Paracelso uso el término gnomus (latín) para sus procedimientos alquímicos sobre la tierra y lo registró en su "Líber de nymphis,sylphis, pygmaeis et salamdris, et de caeteribues spiritibus" (1566).
- clásica estatuilla de un gnomo de jardín -
Por otra parte, en el año 1200, un noruego llamado Frederik Ugarph encontró en la casa de un pescador en Trondheim, una escultura de madera de roble de unos 15 cm sin contar el pedestal. Frederik Ugarph compro la escultura, que poseía una inscripción en la base que rezaba "Nisse, riktig storrelse" que en latín significa "gnomo, estatura real". Esto, junto con la asociación del gnomo con la tierra se consideran un posible origen para la costumbre de colocar pequeñas esculturas de gnomos en los jardines.
En la cultura popular
Miles son las historias sobre los gnomos a lo largo y ancho del mundo, la literatura y el cine se han encargado de expandir la imagen de estas criaturas a casi todos los países del mundo, generando a la vez historias en otros lugares, muy lejanos a su lugar de origen.
Pulgarcito, el pequeño muchacho del cuento puede ser considerado un gnomo. Rumpelstiltskin es un famoso gnomo de grandes poderes, que propone a una joven doncella una adivinanza: descubrir su nombre.
- Rumpelstiltskin y la doncella -
También existen muchos gnomos en cuentos de diversos países, estos son algunos nombres de los más conocidos: Tom-tittot (inglaterra), Whuppity Stoorie (escocia), Winterkoble (hungría), Hruzimugeli (Austria), Titteli Ture (suecia), Gilitrutt (islandia) y Gnomengren (argentina).
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