viernes, 15 de febrero de 2008

Brujas


Existen muchas historias sobre brujas, se las asocia con la maldad y la oscuridad, verrugas, escobas voladoras, gatos negros y pactos con el diablo.
Se las asocia de esta manera porque se sabe que son amigas de la noche, de la luna y la oscuridad es decir lo opuesto a la luz o lo luminoso.
En realidad las brujas eran simples mujeres adoradoras de la luna y de la madre tierra, pero principalmente tenían inmensas cantidades de información, lo que le costo la vida a muchas de ellas, todos conocemos las historias de las quemas de brujas; cualquier mujer que supiera mas de lo normal era acusada de brujería y quemada en la hoguera, tengamos en cuenta que para la época era poco común encontrar mujeres inteligentes.

Brujas de todo tipo han existido en cualquier civilización, Asiria, Babilonia, los pueblos de la Europa medieval y del centro y sur de África, etc. Por definición se sabe que una bruja es una mujer con poderes sobrenaturales. Si bien los poderes de una bruja varían de una sociedad a otra, es una creencia muy común el hecho de que una bruja pueda causar daño o curar con hierbas mágicas, de matar a distancia con un conjuro, controlar el clima, volar o convertirce en animales. Aunque una bruja no tuviera malas intenciones de todas formas eran asociadas con el mal y la desgracia y se asociaba a la brujería como cosa únicamente de mujeres, si bien los hombres también podían practicarla, o al menos así lo era en la sociedad occidental.

- Dos brujas echando una serpiente y un gallo a un caldero para hacer que el cielo granice -

Según la antigua literatura griega y romana, las brujas pasaban la mayor parte del tiempo elaborando pociones con hierbas mágicas y partes de animales. Andaban descalzas y usaban el cabello suelto, largo y despeinado. Frecuentaban los cementerios donde invocaban espíritus y rendían culto a Diana, diosa de la luna y la caza o a Hectate, diosa de la fertilidad y reina de la noche. Se decía que recolectaban plantas y desenterraban huesos para sus pociones e incluso se llego a creer que podían matar con una simple mirada. Las brujas de Tesalia, al norte de Grecia podían bajar la luna a la tierra y usar sus poderes en su beneficio. Apuleyo, un poeta romano del siglo II las describe como "capases de hacer descender el cielo, secar los manantiales y arrastrar montañas".

En la edad media aparecieron las llamada Brujas blanca, asociadas con la curación, la protección, podían alejar enfermedades, asegurar una cosechas prospera, hacer talismanes y amuletos para alejar la mala suerte y las peste. Al igual que los brujos, eran temidas y respetadas por la gente y acudían a ellas en busca de ayuda y consejo. Pero, estas mujeres sabias de los pueblos fueron las primeras en ser acusadas durante el terror de la caza de brujas que se extendió por el oeste de Europa durante los siglos XVI y XVII. De todas formas la caza de brujas no tardo en afectar hombres y mujeres de todos los oficios y condiciones. Considerados herejes, enemigos de la iglesia y adoradores del diablo, las acusadas eran culpables de cualquier cosa, desde una mala cosecha a la muerte repentina de un niño, propagaciones de enfermedades, muerte del ganado, etc.

Se comenzó a hablar de pactos con el diablo, asesinatos rituales, vampirismo y canibalismo. También se decía que podían ser vistas en caminos y bosques donde se juntaban a adorar al diablo con rituales y bailes. Solían trasladarse sobre escobas, montadas sobre demonios o sobre espíritus en forma de animal que las ayudaban (usualmente gatos).

Estas fantasías enriquecieron la literatura acerca de las brujas y al finalizar la caza de brujas en el siglo XVIII, la imagen de la bruja típica estaba bien definida: curtida y arrugada, nariz aguileña y verrugas en el rostro, barbilla afilada, cabello enmarañado y labios prominentes y torcidos. Eran pobres y vivían apartadas de la sociedad. Por esto ultimo es que los cazadores de brujas se empeñaban en la búsqueda de ancianas feas y solitarias; aunque muchas mujeres acusadas de brujería eran jóvenes, vallas y ricas. La imagen estereotipada de la bruja ha cambiado muy poco desde el siglo XVIII.

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